Las autoridades de Nepal elevaron a 68 el número de muertes confirmadas tras el siniestro de un avión que se estrelló este domingo con 72 personas a bordo, entre ellas una de nacionalidad argentina, en uno de los accidentes aéreos más letales que ha tenido lugar en el país del Himalaya.
El Centro de Coordinación de Rescate del Aeropuerto Internacional de Tribhuvan, en Katmandú, indicó que hasta el momento se han recuperado 68 cuerpos del punto del accidente, mientras continúan las operaciones para hallar a los otros cuatro pasajeros, informó el diario nepalí Katmandu Post.
El vuelo, procedente de Katmandú, la capital nepalesa, se estrelló poco antes de las 11 hora local (2.15 hora argentina) cerca de Pokhara, en el centro del país, donde debía aterrizar. Esta ciudad es un punto de paso importante para peregrinos y montañistas extranjeros.
En el avión iban 68 pasajeros, uno de ellos argentino, y cuatro tripulantes, según la aerolínea Yeti Airlines. A su vez, estaban a bordo otros 14 extranjeros: cinco ciudadanos de India, cuatro rusos, dos coreanos, un australiano, un irlandés y un francés, precisó el portavoz de la aerolínea, Sudarshan Bardaula.
El fuselaje incendiado del aparato se encontraba en un profundo barranco entre el antiguo aeropuerto de Pokhara, creado en 1958, y el nuevo terminal internacional de esta ciudad, inaugurado el pasado 1 de enero.
“El aparato se estrelló en un barranco, así que es difícil sacar los cuerpos. La operación de búsqueda y rescate continúa. De momento no se han encontrado supervivientes”, dijo a AFP un portavoz del ejército, Krishna Prasad Bhandari.
Un funcionario local dijo inicialmente que “algunos” sobrevivientes fueron llevados al hospital, pero esto no fue confirmado ni por Yeti Airlines ni por otras fuentes.
Tras el accidente, los rescatistas trataron de sofocar el fuego entre los restos del aparato, un ATR 72 propulsado por dos motores turbohélice.