Este 9 de julio, en coincidencia con el festejo de la Independencia de nuestro país, se inaugura oficialmente el Gasoducto Presidente Néstor kirchner (GPNK) , un gran paso hacia la soberanía energética de nuestra Nación.
Una obra que tiene, sin dudas, como puntapié a las políticas llevadas adelante por los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner, quienes comenzaron durante sus mandatos al frente de los destinos del país un proceso de redireccionamiento de la política energética. En este sentido, la renacionalización de YPF, sin dudas, fue la política más contundente.
Sin embargo, llegar hasta la creación del nuevo Gasoducto no fue tarea sencilla, la decisión política sorteó hasta llegar a su concreción diferentes tipos de obstáculos, entre ellos, uno muy poderoso: la negativa constante del Fondo Monetario Internacional. Este 9 de Julio, como una metáfora de la independencia y la soberanía, nuestro país comienza el camino del autoabastecimiento energético.
El proceso de llenado del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner completó la habilitación del cuarto tramo -comprendido entre los kilómetros 89 y 145, a la altura de la provincia de La Pampa-, de acuerdo con el cronograma establecido y que prevé su inauguración oficial el domingo 9 de julio después del mediodía con un recorrido de funcionarios y funcionarias.
La habilitación parcial y progresiva es un procedimiento habitual que se realiza para garantizar el llenado homogéneo del ducto con gas natural e ir desplazando el aire. Además, permite probar el funcionamiento de los sistemas de medición y regulación de las plantas.
De esta manera, se avanza en la habilitación de acuerdo con los publicado oficialmente por la Secretaría de Energía.
«Con la apertura de la cuarta válvula del Gasoducto Néstor Kirchner estamos más cerca de que esta importante obra nos permita ahorrar, en lo que queda del año, 2.000 millones de dólares en importaciones energéticas y a partir del 2024, 4.200 millones anuales», señaló a través de un mensaje en su cuenta de Twitter el ministro de Economía, Sergio Massa.
La obra fue terminada en un plazo récord de 178 días, no se registró ningún accidente y está a solo 10 días de su puesta en funcionamiento total.
La construcción del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner (GPNK) se inició tras la firma de contratos en agosto de 2022, cuando comenzaron los trabajos de movimiento de suelo, traslado de equipamiento y apertura de pista, que es el “camino” por donde se coloca el gasoducto.
El GPNK, en sus dos etapas contempla un total de 1050 km de largo que atraviesan Neuquén, Río Negro, La Pampa, Buenos Aires y Santa Fe; prevé 90 cruces especiales y 6 plantas compresoras.
El potencial de la obra radica en las posibilidades del autoabastecimiento y en la exportación de gas natural entre otras.
Cuando se comience a inyectar gas al sistema a través de la planta Saturno de la operadora TGS en la localidad bonaerense de Salliqueló, el Gasoducto Néstor Kirchner aportará 11 millones de m2 diarios en una primera instancia para luego incrementar a 21 millones con la puesta en marcha de dos plantas compresoras.
Impacto social, económico y productivo
La Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y la empresa estatal Energía Argentina realizaron, en conjunto, un proyecto de investigación en el cual se abordó el análisis de la inversión comprometida con la construcción del GPNK.
Se analizó su impacto en el ahorro de divisas que significará para el país; descripción del efecto multiplicador de la obra en la inversión y el consumo; aporte de la obra para configurar una matriz energética ambientalmente más sustentable; el impacto de la obra en la generación de empleo; análisis de la innovación tecnológica y desarrollo de nuevas capacidades laborales a partir de la obra; estudio del impacto en el empleo y la actividad económica en 4 localidades de las 4 provincias que atraviesa el Gasoducto y reconstrucción de las principales valoraciones sociales.
Para el apartado de inversión y ahorro de divisas cabe resaltar que se destaca que se estima una inversión en 2524 millones de dólares.
Representa 0.4% del PIB nacional y al 1.9% del presupuesto de la Administración Pública Nacional. El informe también destaca que «tiene una gran incidencia para el agregado nacional y las cuatro provincias que abarca la gran obra».
La obra permite la sustitución de importaciones de forma progresiva en la media que se aumente la capacidad de transporte.
De acuerdo con las estimaciones, se prevé que el ahorro anual rondará los casi 4300 millones de dólares lo que permitiría una reducción en las importaciones de 7.1%.
También determinó que por cada peso invertido en la construcción del primer tramo del Gasoducto se generaron $1,51 pesos adicionales en la economía.
Otro de los tópicos consignados por el paper académico es el que contabiliza la utilización de 14.000 camiones sólo para el transporte de los caños.
“La logística asociada al abastecimiento de los caños desde el conurbano bonaerense hasta los distintos acopios implicó no solo un trabajo importante de organización, sino también de costos de transporte: se estiman 13.658 viajes entre las zonas de origen y los acopios sobre la traza”, indicó el texto.
Además, ese despliegue implica un consumo de gasoil cercano a los 7,7 millones de litros por un costo aproximado de US$ 7,1 millones y retribuciones del personal de conducción en torno a los US$ 5,3 millones.
En lo que respecta al empleo, se calcula que el Gasoducto produjo cerca de 40 mil empleos , tantos directos como indirectos o inducidos.
En el empleo directo, se estima que una vez finalizada la obra habrán generado 3873 empleos directos asociados a la construcción del GPNK, a la vez que entre bajas y altas, pasaron por la obra unos 5500 trabajadores y trabajadoras.
En el empleo indirecto, se generaron unos 36017 empleos y se calcula que se cubrieron más de 500 tipos de trabajos distintos.
Palos en la rueda
El Gasoducto se pudo lograr en 178 días; sin embargo, no estuvo exento de dilaciones y supeditado a operaciones políticas que generaron demoras, contratiempos y problemas para la concreción de la obra.
El primer y más poderoso palo en la rueda vino de parte del FMI. El ministro de Economía y candidato a Presidente de la Nación, Sergio Massa, aseguró que el Fondo Monetario Internacional no quería que el Gasoducto Presidente Néstor Kirchner se construyera este año. E incluso contó la fuerte pelea que tuvo en diciembre del año pasado, cuando el FMI le exigía no poner la construcción del GPNK en el primer semestre de 2023 porque el dinero debía usarse para cumplir la meta fiscal exigida por el organismo. [1]
En este marco, es importante recordar la dilación para la firma del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU): el Ministerio de Economía a cargo del entonces ministro Martín Guzmán demoró el expediente para la gestión de la firma del DNU 69 días, a lo cual se suma la demora de la Secretaría de Presidencia, el expediente demoró 82 días.
Antonio Pronsato y su renuncia: Pronsato era el técnico contratado por el Gobierno para llevar adelante la construcción del gasoducto Néstor Kirchner (GNK). Sin embargo, el 30 de mayo de 2022 renunció intempestivamente. La renuncia, de acuerdo con algunos medios, no terminaba de quedar claros, dado que el técnico se limitaba a señalar: «no se tomaron las decisiones que había que tomar»[2]
Sin claridad sobre las razones de su renuncia, este hecho generó un golpe público al proyecto quien tendió -gracias a los medios de comunicación hegemónicos siempre dispuestos al armado de operaciones políticas- a asociarlo con hecho irregular.
Por otra parte, también se indicó un posible acuerdo entre el entonces ministro de Economía, Martín Guzmán, y Pronsato en el que se creaba una unidad especial para la ejecución del proyecto del gasoducto dependiente directamente del ministro. El objetivo de fondo, de ser cierto el trascendido, era quitarle a ENARSA y al kirchnerismo la conducción de la obra.
Martín Kulfas y su denuncia: El viernes 3 de junio de 2022, luego del acto por los 100 años de YPF, Kulfas, entonces ministro de Desarrollo Productivo, deslizó un off a la prensa: «Información en OFF. La lapicera la tienen que usar los funcionarios de Cristina, que fijaron las condiciones para darle la construcción de las cañerías del gasoducto de Vaca Muerta a Techint. Es Integración Energética Argentina (IASA), con funcionarios designados por ella, quienes hacen las licitaciones. Los que no usaron la lapicera como corresponde fueron sus funcionarios de Ieasa».
«Información en OFF. La lapicera la tienen que usar los funcionarios de Cristina, que fijaron las condiciones para darle la construcción de las cañerías del gasoducto de Vaca Muerta a Techint. Es Integración Energética Argentina (IASA), con funcionarios designados por ella, quienes hacen las licitaciones. Los que no usaron la lapicera como corresponde fueron sus funcionarios de Ieasa», se lee al comienzo del mensaje.
Continúa:
«Ellos armaron un pliego de licitación a la medida de Techint y de la chapa que el grupo fabrica en Brasil, de 33 mm de espesor. Si en lugar de poner esa especificación hubieran puesto 31mm, como son los gasoductos en Europa, se podría haber provisto caños desde otra firma que produce en Villa Constitución (Laminados industriales SA)».
Descabelladamente, Kulfas señaló que había un hecho de corrupción en la construcción del gasoducto y en el que estaban inmiscuidas La Cámpora y Cristina Kirchner. Como era de esperarse los medios[3] y la oposición se sumaron a la denuncia falsa.
Basta ver como el lunes 6 de junio de 2022, los diputados opositores Waldo Wolf y Graciela Ocaña realizaron una denuncia penal. En la denuncia redactada se apuntaba no sólo a los funcionarios de ENARSA a cargo de la realización de la obra, sino también a los funcionarios de la Secretaría de Energía, puntualmente el entonces subsecretario de Energía Eléctrica Federico Basualdo, como responsables políticos de la gestión de la obra.
Finalmente, Kulfas debió comparecer ante la justicia[4] para confirmar todo lo dicho en ese off. Su declaración fue: “Lo primero que tengo que manifestar es que, en ningún momento, quise señalar o hacer mención a actos de corrupción. Si hubiese tenido algún elemento que indicara la existencia de posibles actos de corrupción, los habría denunciado en sede judicial”.
El no de Guzmán: A raíz del manto de sospecha que tendió Kulfas sobre la obra, y con el fin de quitar cualquier sospecha, se le ofreció a Martín Guzmán -en varias oportunidades- que encabece la Comisión de Evaluación y Seguimiento de la construcción del Gasoducto. El entonces ministro se negó sistemáticamente a formar parte de dicha comisión.
Finalmente, y pese a las trabas de propios y ajenos, el Gasoducto continúa a paso firme su llenado y el próximo domingo se pondrá en funcionamiento, abriendo efectivamente un camino hacia la soberanía energética tan necesario para el crecimiento de nuestro país en el actual contexto mundial. Un contexto en el cual la energía es una de las claves con mayor impacto en términos geopolíticos.
Aportes periodísticos
[1] https://mase.lmneuquen.com/fmi/massa-revelo-que-el-fmi-queria-postergar-el-gasoducto-nestor-kirchner-n1036104
[2] https://www.infobae.com/economia/2022/06/15/antonio-pronsato-el-ingeniero-que-renuncio-a-hacer-el-gasoducto-kirchner-no-se-tomaban-las-decisiones-para-que-la-obra-avance/
[3] https://www.lanacion.com.ar/politica/alberto-fernandez-echo-a-kulfas-por-criticar-a-cristina-kirchner-nid04062022/
[4] https://www.cronista.com/economia-politica/rafecas-cito-a-kulfas-por-la-denuncia-sobre-la-licitacion-del-gasoducto-kirchner/
Por María Quintero/revistappv.com.ar