El antropólogo, investigador y docente de la UNCUYO se refirió a la presencia ancestral de los pueblos mapuches en el territorio de la actual provincia de Mendoza, y explicó cómo fue la conformación del pueblo mapuche.
“Hay y hubo siempre mapuches en Mendoza”. La frase sale de boca del antropólogo, investigador de Conicet y docente de la UNCUYO, Diego Escolar.
El profesional lamentó las confusiones, medias verdades y el uso político que se dio al tema, desde que el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) publicó en el Boletín Oficial la finalización de los relevamientos jurídicos, técnicos y catastrales en las que reconoció la posesión de tierras a tres comunidades del sur mendocino de la comunidad mapuche.
Mapuches o mapuches autopercibidos: el debate de su historia en Mendoza y los conflictos por la posesión de tierras.
Escolar comentó que el mapuche fue un pueblo compuesto por distintas parcialidades, que se articularon y compartieron una lengua y pautas culturales y políticas.
“El error principal es considerar que la palabra mapuche es un término étnico, desde el período colonial o desde antes incluso. Eso es falso, no existía el uso del término mapuche como una identidad étnica. Entonces, cuando los historiadores recurren a los elementos coloniales y ven las denominaciones que se les daban los mismos españoles a los distintos grupos indígenas no encuentran la palabra mapuche, encuentran otros términos que integraban a lo que hoy llamamos pueblo mapuche que les fueron adjudicados, como puelches, pehuenches, chiquillanes, huiliches”, expresó.
El investigador explicó que todos esos grupos conformaron lo que se denominó pueblo mapuche, pero que existen personas que siguen sosteniendo teorías perimidas que consideran a cada una como una unidad étnica propia. “Ese imperdonable que sigan repitiendo esto entre historiadores y antropólogos. Hay por lo menos 30 años de investigación que se han dedicado a estudiar cómo se fueron conformando las clasificaciones identitarias”, comentó.
El docente de la UNCUYO comentó que antes de la llegada de los españoles, los pueblos que formaban parte de lo que considera mapuche se movilizaron a través de la cordillera, que no era un límite como se considera actualmente, sino el centro de vida social, de intercambios, de luchas, de cooperación. “El principal anacronismo es considerar que esos desplazamientos eran invasiones de unos sobre otros como si los territorios de otros eran fijos”, comentó.
Escolar dijo que más de la mitad del territorio mendocino, hasta fines del siglo XIX era territorio indígena. “Ahí se establece primero un control sobre Huanacache y después viene la Campaña al Desierto, que en Mendoza el principal artífice fue Rufino Ortega y cuando los criollos comienzan a controlar Malargüe y el sur, que hasta ese momento era territorio indígena”.
Consultado por Radio U sobre las razones de por qué se generó tanta resistencia luego de la publicación del fin de los relevamientos, Escolar explicó que desde su visión hay dos aspectos centrales. El primero -comentó- es que los mapuches adquirieron mucha relevancia como uno de los pueblos más organizados y combativos en la defensa de sus derechos. Indicó que esta situación, generó una campaña en “anti mapuche”, que los coloca en el lugar de enemigo interno.
“Hay una cuestión ideológica de fondo: el que tiene derecho al uso de la tierra es el empresario, blanco y si es extranjero, mejor. Se considera que ese es el sujeto apropiado para explotar los recursos, en cambio, los puesteros pobres, y más si son indígenas, se considera que prácticamente no son argentinos”, expresó.
Por unidiversidad.com.ar