La empresa La Rural recibió asistencia técnica del instituto para aplicar buenas prácticas orientadas a un manejo más eficiente del agua en su planta elaboradora y para minimizar el impacto ambiental de los efluentes.
La industria vitivinícola no es ajena a la emergencia hídrica que afecta a la provincia de Mendoza. En este escenario, la empresa Bodegas La Rural se acercó al Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) con el interés de hacer un uso más responsable del agua en su proceso productivo. El trabajo que se desarrolló para reutilizar la solución que se usa en la limpieza de tanques, disminuir la carga salina de los efluentes que se destinan a riego agrícola y reducir la materia orgánica soluble en los efluentes estará disponible para todas las bodegas del país.
“El rol del INTI es ayudar a cada proyecto y cada empresa que esté cambiando la estructura productiva para alcanzar una industria que esté en la frontera tecnológica, que innove en sus procesos y en la búsqueda de soluciones para una producción sostenible. El resultado del trabajo conjunto con Bodegas La Rural es una muestra concreta de la articulación virtuosa entre el sector público, los trabajadores y las empresas”, resaltó el secretario de Industria y Desarrollo Productivo de la Nación, José Ignacio de Mendiguren.
La titular del INTI, Sandra Mayol, señaló que “el cuidado de los recursos y las prácticas sustentables en la industria son ejes de trabajo estratégicos para el INTI, en particular en regiones como Cuyo, donde el agua es un recurso escaso. En este sentido, trabajamos de manera articulada junto a las industrias y otros organismos para promover un uso responsable en la cadena de producción vitivinícola”.
El consultor técnico y responsable de la gestión ambiental de Bodegas La Rural, Miguel Escalante, explicó que el INTI les brindó “asistencia técnica para validar la reutilización de la solución que se emplea en la limpieza de tanques, caracterizada por una alta conductividad eléctrica”. Luego de una serie de ensayos en planta y estudios realizados en los laboratorios de la sede del INTI en Mendoza, profesionales del departamento de Producción Sustentable lograron la validación de este proceso.
“Desde el instituto nos propusimos demostrar que al reutilizar esta solución de limpieza en diferentes tanques era posible ahorrar insumos y, por consiguiente, la cantidad de agua empleada. La limpieza es uno de los puntos críticos en el trabajo a la hora de avanzar hacia un uso eficiente del agua en las plantas de producción”, explicó la ingeniera química Natalia Vanin, responsable de dicho departamento del instituto en la región Cuyo.
Este trabajo dio pie para que la cámara Bodegas de Argentina solicitara al Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) que incluya el procedimiento de limpieza como parte de las Buenas Prácticas dentro de las plantas elaboradoras de vino.
La empresa continuó su vínculo con el INTI con el objetivo de abordar una problemática que afecta los alrededores de la Bodega La Rural, ubicada en medio del entramado urbano del departamento de Maipú: el tratamiento de la carga orgánica de los afluentes y el olor que esto produce, sobre todo en temporada de vendimia. El INTI, en calidad de organismo técnico, estudió y validó la aplicación del reactivo de Fenton (tratamiento por oxidación) en la disminución de dicha carga y la consecuente neutralización de olores.
“Es un avance más que realizamos en favor de la agroindustria mendocina. Tenemos que seguir el camino virtuoso entre lo privado y lo estatal, con instituciones como la del INTI que ponen equipamiento, infraestructura y personal técnico de alta capacitación al servicio de la comunidad agroindustrial”, expresó el responsable de la gestión ambiental de la bodega.
En tanto, la especialista del INTI enfatizó que “la reutilización del agua industrial residual tratada es un recurso valioso y su demanda aumentará si disminuye la disponibilidad del recurso hídrico”.
Entre otros trabajos en los que el INTI ha participado en relación a esta industria, se destacan, por ejemplo, la elaboración digitalizada de la Guía de Sustentabilidad del Sector Vitivinícola. Se trató de un trabajo impulsado por el Ministerio de Ambiente de la Nación, con involucramiento de Bodegas de Argentina, el INV, el INTA y la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo).
Otra experiencia de trabajo interinstitucional fue la puesta en marcha, a fines de 2022, de un curso específico destinado a propietarios y mandos intermedios de empresas vinculadas al sector, además de técnicos y profesionales. Los contenidos estuvieron a cargo de expertos de diversas organizaciones: además del INTI y el INV, aportaron especialistas en distintas temáticas del INTA, la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNCuyo, la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR) y Bodegas de Argentina.