Referentes del ciurquismo, sureño y massistas se encontraron en San Rafael para hablar, entre otras cosas, sobre la reforma fiscal que propone el Gobierno provincial. Los sectores ausentes.
El peronismo mendocino busca acomodarse a estas épocas libertarias de recortes presupuestarios y con varias reformas que van a contramano de lo que estipularon sus gobiernos nacionales. Y no está ajeno a internas, ahora que se mantiene como oposición.
Una foto de una reunión ocurrida en San Rafael, con los hermanos Félix, es una muestra del estado en el que se encuentra el PJ local.
Se trató, en principio, de una cumbre no kirchnerista, concretamente, porque en la imagen que circuló no sale ningún referente del cristinismo mendocino.
Se encuentran Omar y Emir Félix, intendente y ex jefe comunal de San Rafael. También están Matías Stevanato, de Maipú; Flor Destéfanis, de Santa Rosa; y Fernando Ubieta, de La Paz.
Hay referentes legislativos, como Adriana Cano, jefa del bloque de senadores en la Legislatura; Juan Pablo Gulino, un alfil de Stevanato y, a su lado, la diputada Verónica Valverde. Enfrente, se ubicó otro diputado también de San Rafael, Gustavo Perret. Y otro hombre vinculado a los Félix, el ex legislador Gustavo Valls.
En líneas general, una imagen compuesta por el peronismo no kirchnerista, pero también sin que haya estado presente algún referente de Tunuyán, Malargüe o de Lavalle. Es decir, un peronismo de tres patas: el sureño, el ciurquista y el massista.
Sobre el encuentro, señalaron en reserva que fue “una reunión de trabajo, como solemos tener seguido“.
Y marcaron que se habló sobre la reforma fiscal que presentó el ministro de Hacienda Víctor Fayad, que incluye entre otros puntos cambios en la coparticipación, como tema principal.
Pero también una picada de cuestiones en las que se habló sobre la relación con el Partido Verde y las autoridades del partido.